El uso de dispositivos móviles está tan integrado en nuestra rutina que no nos despegamos de nuestro iPhone prácticamente en ninguna circunstancia. Ni siquiera para ir al baño o para ir a la playa. Es por eso que todos hemos arrojado nuestro móvil al váter sin querer en algún momento de nuestra vida o nos hemos bañado con el móvil dentro del bolsillo.
Debido al gran número de averías asociadas a daños por líquidos, los gigantes tecnológicos como Apple se esfuerzan año tras año por mejorar la resistencia al agua de sus dispositivos.
Ya sea implementando el sistema de sellado o realizando modelos de fabricación más compactos y con menos puertos de entrada, los iPhone son cada vez más resistentes al agua.
Sin embargo, ¿significa esto que puedo utilizar mi iPhone debajo del agua o que sea completamente inmune al derramamiento de líquidos? No exactamente.
iPhone y daños por líquidos: Certificación IP
La certificación IP clasifica los dispositivos según su grado de resistencia al agua y al polvo.
En lo referente a la resistencia al agua, los grados van desde el 0 hasta el 9.
- 0: Ninguna clase de protección
- 3: Resistencia a humedad ambiental
- 4: Resistencia a la lluvia
- 7: Resistencia a inmersiones de corta duración y poca profundidad
- 8: Resistencia a inmersiones de más duración y profundidad
El primer modelo en el que Apple introdujo algún grado de resistencia al agua fue el iPhone 7, llegando a alcanzar en los iPhone 12, 13 y 14 una certificación IP68. Esto se traduce en que estos modelos de iPhone pueden llegar a sumergirse durante 30 minutos hasta 6 metros de profundidad.
Sin embargo, ningún iPhone está diseñado para ser utilizado bajo el agua. Es decir, al contrario que otros dispositivos como los Apple Watch, los iPhone no son dispositivos aptos para el uso acuático.
Eso sí, estas mejoras técnicas sí permiten proteger nuestro dispositivo de inmersiones imprevistas o accidentes con líquidos.
Cabe destacar, aun así, que el sistema de sellado que protege y aísla al iPhone del agua se desgasta con el uso normal y continuado del dispositivo y que la garantía de Apple no cubre los daños por líquidos en ningún caso.
Por lo tanto, pese a que existan mejoras técnicas que protegen nuestro iPhone de los daños por líquidos, hay que seguir tratando nuestros dispositivos con cautela si queremos que tengan un tiempo de vida proporcional a su coste.
Si has sufrido daños por líquidos en tu iPhone, no dudes en acudir a MiMacService. Estamos en la Calle Colón de Valencia, a 300 metros de la Apple Store. Haremos todo lo posible por reparar tu iPhone con la mayor brevedad posible.